Percloratos, cloratos y cloruros suenan parecido pero no lo son en absoluto.
Los percloratos (ClO4-) son utilizados en pirotecnia y por lo tanto cuando existe resíduo de percloratos en los alimentos se le achaca a una contaminación, es decir, los percloratos han llegado a los alimentos de forma accidental. Los límites de contaminantes en la Unión Europea (UE) están regulados por el reglamento 1881/2006. Y en concreto los límites de perclorato permitidos en alimentos cambiarán el próximo 1 de julio tal como comentamos hace una semana según el reglamento de la comisión 2020/685.
Por otra parte los cloratos (ClO3-)a pesar de estar prohibidos como pesticida en la Unión Europea siguen siendo usados en algunos países como herbicida. De acuerdo a la base de datos Homologa diversos herbicidas formulados a base de cloratos pueden seguir siendo usados a día de hoy en países como EE.UU. , Australia, Japón, Taiwan, etc. Por esa razón, la UE ha establecido LMR (límite máximo de resíduos) para los cloratos. Estos límites cambiarán el próximo 28 de junio de 2020 de acuerdo al reglamento de la comisión (EU) 2020/749
Por último, los cloruros o dicho de otra manera las sales que llevan el anión cloro; son un caso más complejo. Algunas sales como el cloruro de sodio (la sal común) se consideran una sustancia básica y tal como explica el reglamento de la comisión 2018/70 no tienen un límite MRL «No MRL required«. Sin embargo, exiten otro tipos de sales tal como el cloruro de calcio cuyo uso en agricultura no está permitido y tienen un LMR por defecto de 0.01 mg/kg (partes por millón).
Por último está el ión cloruro (Cl-) que se encuentra en disolución en el agua. La organización mundial de la salud establece como límite de ion cloruro 250 mg/l. En la imagen a continuación se puede ver una botella de agua con un nivel de ion cloruro de 23.3 mg/l.
